04/04/2005

La luz sigue entrando por la ventana, contorneando en ocre tu figura, que recorro nervioso y risueño, casi abrumado y ruborizado por ser descubierto entre fantasías. Mientras duermes, tu respiración me hipnotiza, y juego a correr por tus caderas, saltando tu ombligo, escondiéndome entre los dedos te observo en silencio, nada puede ser tan grande como este momento hasta que recuerdo que pronto despertaras, y tu sonrisa cómplice de mi secreto, iluminara mas que el sol si cabe. ¿porque no parar el tiempo y seguir así eternamente? ¡¡¡y una mierda!!! ¿¿y dejar de disfrutar de todos los momentos que me quedan??. Pobre el que piense lo contrario.